Ficciones es el segundo libro de nuestra colección y, aquí en el blog, estaremos analizándolos desde ahora hasta noviembre, cuando acabamos el libro. Esta exquisita obra se publicó en 1944 y consta de dos partes: El jardín de los senderos que se bifurcan (publicados en 1941) y ya después, en 1944, añade la segunda parte, Artificios. Surge así Ficciones.
Estaba leyendo mis apuntes de la universidad y me encuentro con que este libro del que hablamos se escribe tras un accidente de Borges en el que casi pierde la vida. A los treinta y siete años, Borges se topa con la cruel realidad de que tiene que ponerse a trabajar, por primera vez en su vida, porque su padre muere. Consigue un puesto en la Biblioteca nacional y, un año después, se cae por las escaleras y se da un golpe en la cabeza con una ventana recién pintada, lo que le provoca una intoxicación.
Según el prólogo al Jardín de los senderos que se bifurcan, se trata de una obra que es policial; sus lectores asistirán a la ejecución y a todos los preliminares de un crimen, cuyo propósito no ignoran pero que no comprenderán hasta el último párrafo. Así que, antes incluso de comenzar con el libro, ya aparece un punto de intriga que nos tendrá atados hasta el final.
Yo leí Ficciones en la universidad y recuerdo que me fascinó. Volver a leerlo con vosotros, analizar todos los cuentos, hablar de ellos y encontrar nuevos puntos de vista que me son otorgados por la edad y la crecida experiencia lectora, va a ser un ejercicio filológico maravilloso. Además, vamos a poder leer el cuento que da nombre a este mismo blog.
Espero que os guste.