EL ATROZ REDENTOR LAZARUS MORELL

Nota previa: puedes leer el cuento aquí.

Nos adentramos en los cuentos de la Historia universal de la Infamia (1935) y este, en concreto, es el primero de ellos. Cuenta, bajo la influencia de Mark Twain, la historia de Lazarus Morell, un poor white muy orgulloso de no tener una sangre mezclada, que se dedicaba a traficar con esclavos negros.

Pero empecemos por el principio del cuento, que es muy curioso, donde Borges comienza por la causa remota de la existencia de Lazarus: la propuesta a Carlos V de Bartolomé de las Casas, en 1517, de importar negros de África a las millas de oro antillanas. De ahí, se enumeran una serie de hechos ocurridos como consecuencia de esta atrocidad.

A esta curiosa variación de un filántropo debemos infinitos hechos: los blues de Handy, el éxito logrado en París por el pintor doctor oriental don Pedro Figari […] el tamaño mitológico de Abraham Lincoln, los quinientos mil muertos de la guerra de Secesión, los tres mil trescientos millones gastados en pensiones militares […] la admisión del verbo «linchar» en la decimotercera edición del diccionario de la Academia […] la deplorable rumba El manisero1

Y consecuencia de todo esto es también Lazarus Morell, quien básicamente se encargaba de hacer creer a los negros, que trabajaban en las plantaciones de algodón a orillas del río Mississippi, que los podía liberar. Les decía que lo único que tenían que hacer era huir de sus dueños y dejarse vender unas cuantas veces más hasta que llegaran a otro Estado en el que, por fin, serían libres.

Recorrían las vastas plantaciones del Sur. Elegían un negro desdichado y le proponían la libertad. Le decían que huyeran de su patrón, para ser vendido por ellos una segunda vez, en alguna finca distante. Le darían entonces un porcentaje del precio de su venta y lo ayudarían a otra evasión. Lo conducirían después a un Estado libre. Dinero y libertad, dólares resonantes de plata con libertad, ¿qué mejor tentación iban a ofrecerle? El esclavo se atrevía a su primera fuga2.

Pero la libertad era demasiada cuando lo liberaban de la vista, del oído, del tacto, del día, de la infamia, del tiempo, de los bienhechores, de la misericordia, del aire, de los perros, del universo, de la esperanza, del sudor y de él mismo3 porque, llegado el momento, los mataban y continuaban con otro negro.

Esta es la historia real de John Andrews Murrell, un bandido criminal que operaba a orillas del Mississippi y que cuenta hasta con su propia página de Wikipedia. Al principio se dedicaba a robar caballos en un Estado y venderlos en otro pero luego se le fue un poco la mano y acabó haciendo lo mismo pero con personas.

Hay claramente un tono irónico en torno al cuento que procura una ácida crítica al racismo, escrito por secciones perfectamente delimitadas por un título. Más que un cuento parece un artículo periodístico o un informe policial.

¿Os ha gustado el cuento? ¿Se os ocurre algo más que añadir? Os invito a que me lo dejéis en los comentarios.

1BORGES, Jorge Luis. «Historia universal de la infamia», «El atroz redentor Lazarus Morell», Cuentos completos. P.15. Barcelona: Penguin Random House Grupo Editorial, 2019.

2BORGES, Jorge Luis. «Historia universal de la infamia», «El atroz redentor Lazarus Morell», Cuentos completos. P.19. Barcelona: Penguin Random House Grupo Editorial, 2019.

3BORGES, Jorge Luis. «Historia universal de la infamia», «El atroz redentor Lazarus Morell», Cuentos completos. P.20. Barcelona: Penguin Random House Grupo Editorial, 2019.

Publicado por

Isabel

Madrid, 6 de julio de 1993 - Estudié filología hispánica en la Universidad Complutense de Madrid y tengo la inmensa suerte de dedicarme a ella cuando no tengo que trabajar.

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